Si todo el mundo tiene dos pies lo lógico es vender los zapatos en pares ¿No?
Para empezar no todo el mundo tiene dos pies y en segundo lugar lo lógico, aunque suene muy lógico, no siempre es la mejor solución a un problema.
Una empresa en Eaton Rapids, MI. Ha creado un concepto completamente diferente en lo que ha calzado se refiere, sin mayor explicación y sin detenerse a detallar el porque; su negocio esta basado en vender los zapatos de uno en uno, de manera que si una persona perdió una pierna ahora no necesita comprar un par y tener que buscarle lugar al otro, además alguien podría tener una pequeña diferencia en la talla de sus pies y con esta propuesta caminar tranquilo sin la complicación que supone usar los zapatos apretados…
Pero mirándolo desde otro punto de vista, el empresario a quien se le ocurrió esta idea, reúne algunas características que podrían hacerlo exitoso (en realidad a el o a cualquiera de nosotros):
Capacidad de asumir riesgos:
¿Que tanta seguridad hay de que un negocio así funcione a largo plazo?
Astucia:
Cuando la gente va a comprar zapatos, tiene un precio en mente de manera que se prepara para pagar “X” cantidad y justo a ese precio el lo vende, por lo tanto la persona paga lo que esperaba, el asegura la inversión (y gana también) al vender el primer zapato y si logra vender el otro, habrá vendido el par casi al doble, lo cual suena bien
Disposición de ser útil a otros:
Una persona con discapacidad, podría sentirse tomado en cuenta y se evitaría lanzar un zapato a la basura cada vez que compra un par, lo cual tal vez le haga sentir incomodo.
Si somos lo suficientemente arriesgados viviremos episodios de nuestra vida con los que otros solo sueñan, yo conozco la historia de un tal Pedro que por ser osado camino sobre el agua al menos unos instantes.
Si somos tan astutos como una serpiente, con seguridad podemos no solo dar pasos adelante sino además hacerlo con una estrategia e incluso saber a donde vamos (lo cual siempre es útil ¿no?)
Y finalmente si tenemos la disposición de ayudar a otros, haremos que el viaje sea mas cómodo, generaremos sonrisas, tal vez algo de gratitud a cambio, y nos sentiremos útiles
Entonces, me compras un zapato? O te arriesgas y vendes uno?
Para empezar no todo el mundo tiene dos pies y en segundo lugar lo lógico, aunque suene muy lógico, no siempre es la mejor solución a un problema.
Una empresa en Eaton Rapids, MI. Ha creado un concepto completamente diferente en lo que ha calzado se refiere, sin mayor explicación y sin detenerse a detallar el porque; su negocio esta basado en vender los zapatos de uno en uno, de manera que si una persona perdió una pierna ahora no necesita comprar un par y tener que buscarle lugar al otro, además alguien podría tener una pequeña diferencia en la talla de sus pies y con esta propuesta caminar tranquilo sin la complicación que supone usar los zapatos apretados…
Pero mirándolo desde otro punto de vista, el empresario a quien se le ocurrió esta idea, reúne algunas características que podrían hacerlo exitoso (en realidad a el o a cualquiera de nosotros):
Capacidad de asumir riesgos:
¿Que tanta seguridad hay de que un negocio así funcione a largo plazo?
Astucia:
Cuando la gente va a comprar zapatos, tiene un precio en mente de manera que se prepara para pagar “X” cantidad y justo a ese precio el lo vende, por lo tanto la persona paga lo que esperaba, el asegura la inversión (y gana también) al vender el primer zapato y si logra vender el otro, habrá vendido el par casi al doble, lo cual suena bien
Disposición de ser útil a otros:
Una persona con discapacidad, podría sentirse tomado en cuenta y se evitaría lanzar un zapato a la basura cada vez que compra un par, lo cual tal vez le haga sentir incomodo.
Si somos lo suficientemente arriesgados viviremos episodios de nuestra vida con los que otros solo sueñan, yo conozco la historia de un tal Pedro que por ser osado camino sobre el agua al menos unos instantes.
Si somos tan astutos como una serpiente, con seguridad podemos no solo dar pasos adelante sino además hacerlo con una estrategia e incluso saber a donde vamos (lo cual siempre es útil ¿no?)
Y finalmente si tenemos la disposición de ayudar a otros, haremos que el viaje sea mas cómodo, generaremos sonrisas, tal vez algo de gratitud a cambio, y nos sentiremos útiles
Entonces, me compras un zapato? O te arriesgas y vendes uno?
(tomado de mi show de radio "Desde el estudio 4" lunes a viernes 1:30 pm Miami http://www.cvclavoz.com/)
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