Estatuas

Antony Gormley es un escultor ingles cuyo trabajo esta centrado en la figura humana, parte de sus obras están mezcladas en ambientes al aire libre, por ejemplo al norte de Liverpool en una playa que se llama Crosby hay 100 esculturas de figuras humanas tamaño natural dispersas en el área, hechas de hierro permanecen firmes y debido al trabajo artístico de Gormley a lo lejos cualquiera estaría seguro que se trata de personas

Recientemente en New York se coloco una exhibición de 27 cuerpos de hombres en lugares como Madison Square Park, y en lo alto de rascacielos, el artista explico que la idea era estimular la curiosidad y la imaginación y hacer a las personas mirar de nuevo el mundo en el que viven, sin embargo desde lejos cualquiera podría pensar que se trata de personas a punto de saltar y justamente eso fue lo que hicieron muchos que impresionados al ver las imágenes no dudaron en llamar al numero de emergencia 911

Los oficiales de policía dijeron que el asunto era un problema pues distraía a las autoridades de verdaderas emergencias

Recientemente se anuncio una nueva exhibición del artista Ingles en los Alpes Austriacos, en este caso serán 100 las esculturas de hierro y fibra de vidrio que estarán en una parcela de 100 millas cuadradas en la región de Vorarlberg muy popular entre los esquiadores y senderistas, para llevarla a cabo se requiere gran esfuerzo pues cada pieza pesa aproximadamente 640 kilos, pero además esta vez el artista tomo otra previsión; la de enviar la ubicación exacta de cada pieza a los equipos de rescate de la montaña a fin de evitar una epidemia de llamadas reportando escaladores perdidos…

En el día a día nos vamos a encontrar con esculturas de hierro… gente realmente pesada que no es genuina, personas que lamentablemente se han levantado en base a una ilusión, de hecho en realidad no interactúas con ellos sino con sus imágenes creadas, algunos sobreactúan y otros generan llamadas de emergencia pues su habilidad de manipular parece innata, son difíciles de mover y si les hablas no te escuchan, si les invitas a crecer no mueven un pie y si tratas de empujarlas puede ser una labor muy dura, lamentablemente para ellos aunque se han sido “diseñados” con mucho cuidado corren el riesgo de terminar como las estatuas de Gormley, solos y causando curiosidad, alarma o indiferencia.

Afortunadamente Dios tiene el poder de dar vida incluso a quien ha quedado tan atrapado en su deseo de ser que termino inmóvil, así como le dijo a un hombre muerto “Ven fuera!” le sigue diciendo hoy a muchos, levántate, muévete, olvídate de las apariencias, se genuino y sígueme

Carlos Javier Sivira